LA CURIOSIDAD MATÓ AL GATO (y me va a matar a mí)
La curiosidad es algo que me va a matar un día. Eso y la ansiedad. OH POR DIOS BENDITA ANSIEDAD, ALÉJATE DE ESTE CUERPO QUE QUIERE CAER EN LA TENTACIÓN DE SABERLO TODO. Soy curiosa y amo serlo. Quiero saberlo todo acerca de lo que me rodea. No confundan eso con ser chismosa porque no way. Es decir, quiero saberlo todo sobre cosas que aunque sea me rozan la oreja. Es una cuestión que está adherido a mi instinto básico de supervivencia. Cuánto más se, más atenta estoy a todo lo que pueda, literalmente, joderme la vida. Aunque igual es completamente al pedo porque dónde sé algo, me meto -o me meten- de cajón.
Saber todo tampoco es bueno. (Podría hablar horas enteras de "Acerca de Roderer" y no cansarme nunca). Es por eso que si me muero en el corto plazo en mi lápida van a escribir "sabía demasiado". Una cagada que es parte mi personalidad. Además tengo ese bicho molesto de querer resolver problemas ajenos desde la penumbra del anonimato. Qué se yo. Un anti-héroe de las altas esferas de Capital Federal. Llamalo como quieras.
Pero volviendo al tema de "saber", (mucho, poco, lo suficiente). Mamá me hablaba de historias de la Historia, anécdotas que no hacían a la historia en general y que tampoco eran relevantes pero qué se yo, saber que si la nariz de Cleopatra hubiese sido más chica la historia hubiese sido diferente me hace bien al corazón. Sólo por el mero hecho de saberlo. Me encantan las personas que saben MUCHAS cosas sobre MUCHAS cosas. Me parecen interesantes y me pone triste saber que no conozco a mucha gente así. Pero hay. Existen. Y estoy muy segura que si sigo siendo así de curiosa voy a encontrarlos en algún pozo de existencia humana. Algún agujero negro dónde están ellos (personas que se alojan en el ideal colectivo de la gente). La curiosidad mató al gato. Pero mis intenciones tampoco, nunca, fueron buenas. Saber te da poder (todo tipo de poder). Jugás con el ancho mientras todos piensas que tenés un cuatro de copas. Una linda forma de hacerle fuck you a la vida.
Para mi hermana, que tiene secretos con mamá, pero que tarde o temprano los voy a saber.
Coyote
Saber todo tampoco es bueno. (Podría hablar horas enteras de "Acerca de Roderer" y no cansarme nunca). Es por eso que si me muero en el corto plazo en mi lápida van a escribir "sabía demasiado". Una cagada que es parte mi personalidad. Además tengo ese bicho molesto de querer resolver problemas ajenos desde la penumbra del anonimato. Qué se yo. Un anti-héroe de las altas esferas de Capital Federal. Llamalo como quieras.
Pero volviendo al tema de "saber", (mucho, poco, lo suficiente). Mamá me hablaba de historias de la Historia, anécdotas que no hacían a la historia en general y que tampoco eran relevantes pero qué se yo, saber que si la nariz de Cleopatra hubiese sido más chica la historia hubiese sido diferente me hace bien al corazón. Sólo por el mero hecho de saberlo. Me encantan las personas que saben MUCHAS cosas sobre MUCHAS cosas. Me parecen interesantes y me pone triste saber que no conozco a mucha gente así. Pero hay. Existen. Y estoy muy segura que si sigo siendo así de curiosa voy a encontrarlos en algún pozo de existencia humana. Algún agujero negro dónde están ellos (personas que se alojan en el ideal colectivo de la gente). La curiosidad mató al gato. Pero mis intenciones tampoco, nunca, fueron buenas. Saber te da poder (todo tipo de poder). Jugás con el ancho mientras todos piensas que tenés un cuatro de copas. Una linda forma de hacerle fuck you a la vida.
Para mi hermana, que tiene secretos con mamá, pero que tarde o temprano los voy a saber.
Coyote
Comentarios
Publicar un comentario